13 enero, 2012

Perdición. (Rap propio)


No siempre puedo, dejar de adorarte,
porque cielo, tú fuiste mi dulzura, mi amor, y mi locura.
Es algo por momentos, lo que me cuesta es olvidarte,
y cariño, ahora mi vida es tan oscura.

Y cumpliré todo lo que un día soñé, todo lo que pude querer.
Y rastrearé en mi interior, para no dejar rastro de esta perdición.
¿Me amas, me quieres?
¡Gracias, no sabía lo que quieres!

Camino entre barro, entre piedras afiladas que me rompen el peldaño.
Mi aliento se distrae cuando miro los recuerdos, que ahora no puedo dejar de recordarlos.
No es algo que controle, simplemente hace daño.
Y ahora es cuando un día, vuelves a mi lado.

Y cumpliré todo lo que un día soñé, todo lo que pude querer.
Y rastrearé en mi interior, para no dejar rastro de esta perdición.
¿Me amas, me quieres?
¡Gracias, no sabía lo que quieres!

Pero sé que nadie como tú, está esperando detrás de la pared.
Y no entiendo, la manera, el sentido del amor, que no puedo comprender.
Estoy en un gran mar, donde las olas son los daños, donde quiero librarme de por todas de esta ¡estupidez!

Gracias, por darme el lamento que me ha hecho darme cuenta, lo que un día no podía ¡abrir!
Lo siento, por amarte, adorarte, y tanto que no podía respirar.
Espero otra vez sentir, lo que contigo descubrí.

Y cumpliré todo lo que un día soñé, todo lo que pude querer.
Y rastrearé en mi interior, para no dejar rastro de esta perdición.
¿Me amas, me quieres?
¡Gracias, no sabía lo que quieres!

Esta vida perra, no sabe lo que quiere, no es un juego que controles.
Este cielo, donde no sabes quien te mira, es el aire de desilusiones.
Pero ya nada parará, lo que un día me hizo grieta, en la cruz de mi ¡felicidad!
¿Sabes? No es por ti, es por el mero hecho de ser feliz.

07 enero, 2012

Ese ayer.

Recuerdas los momentos de decadencia, cuando el cuerpo se cobija y el pecho se oprime. Cuando la respiración se hace corta, escasa y difícil. Cuando el tiemble de tus manos comienza a desubicarse. Cuando los ojos, no son más que charcos de recuerdos, de recuerdos melancólicos. Cuando la única protección que puedas tener es tu corazón. Cuando el corazón se agrieta, cuando éste se desintegra. Cuando lo que se va, es el amor. Cuando la persistencia de un mañana, podría lograrse con un simple 'te amo'. Cuando a cada noche, revivías una sonrisa. Cuando lo único que necesitaba, eran tus palabras.

03 enero, 2012

Y olvidarme al fin.

Y llegará un momento, en que olvides, en que dejes de recordar como olía mi piel, como se escuchaba mi voz, como se sentía mi roce; mis labios, mis brazos al abrazarte, la sensación que sentías cuando te susurraba al oído cuanto te quería, de mi risa tonta por cualquier cosa graciosa que decías. Te vas deshaciendo poco a poco, limpias tus alrededores y piensas cómo hacer para no dejarme entrar más en tu vida. Y sin querer realmente hacerlo, espero que vengas, que vuelvas y me agarres fuerte para no dejarme ir. Y sin lastimarme, me haces caer una y otra vez, con las mismas palabras, con los mismos recuerdos.

¿Cómo?

Repetidamente, se concentra en mi cabeza una multitud de recuerdos sencillamente, los mejores, que no puedo dejar de olvidar. ¿Cómo puedo deshacerme de tu voz? Si es la sinfonía que me inunda en mis pensamientos. ¿Cómo deshacerme de tus palabras? Que son las que me hacen sonreír. Pero, ¿cómo olvidarte a ti? Si eres lo único que anhelo.